(lanacion.com.ar) l gobernador bonaerense, Axel Kicillof, y el exministro de Economía Sergio Massa participaban esta tarde de la marcha que cuestiona al presidente Javier Milei el recorte al presupuesto de las universidades públicas. Los referentes de la oposición peronista al gobierno libertario caminaban hacia la Plaza de Mayo entremezclados en columnas de la provincia de Buenos Aires y del Frente Renovador. Por cuerda paralela, a distancia, también se movilizaba La Cámpora.

Según pudo constatar LA NACION, el gabinete de Kicillof se trasladó al bar Vittorio, en Yrigoyen al 1400. La vicegobernadora Verónica Magario e intendentes como Julio Alak, Jorge Ferraresi y Andrés Watson aguardaron allí la llegada del gobernador. En Yrigoyen y Solís, a pocas cuadras de allí, se concentró La Cámpora, que protagoniza una creciente tensión política con Kicillof. El senador y titular del PJ porteño, Mariano Recalde, integró esa columna.

La llegada del gobernador por la estrecha calle Sáenz Peña incluyó el despliegue de un cerco de patovicas que custodiaron al mandatario. Armaron un círculo humano a su alrededor y procuraron, con palabras y también con empujones, mantenerlo a rajatabla. Ese despliegue complicó aún más el recorrido de las personas que manifestaban a la altura de la Plaza del Congreso y generó una marea de empujones y algunas discusiones.

Axel Kicillof rodeado de custodios y seguido por su jefe de Gabinete, Carlos BiancoTomás Morrison

Luego Kicillof entró al bar. Habían salido a recibirlo Fernando Espinoza y Andrés Larroque, entre otros. Tuvo una muy breve estadía en el lugar y salió nuevamente, para tomarse fotos con los intendentes. Estaban, entre otros, Mariano Cascallares, Mario Secco, Nicolás Mantegazza, Pablo Descalzo (y su padre, el exintendente Alberto Descalzo, Cecilio Salazar, Jorge Ferraresi, Andrés Watson y Julio Alak.

En la Plaza del Congreso, la administración provincial desplegó dos grandes banderas firmadas con el logo oficial. La más grande rezaba “La Patria no se vende. La universidad se defiende. Provincia de Buenos Aires”, y detrás de ella se ubicaron funcionarios como el jefe de Gabinete, Carlos Bianco. Otra bandera llevaba la leyenda “Educación bonaerense” y agrupó a funcionarios del área educativa, entre ellos el director de Cultura y Educación, Alberto Sileoni.

Axel Kicillof y su vice Verónica Magagio en la marcha universitaria en la ciudad de Buenos AiresRodrigo Néspolo - LA NACION

Pasadas las 16, cuando la columna del FR se aprestaba a comenzar la corta marcha hacia Plaza de Mayo desde Perú y la avenida homónima, Massa hizo su reaparición pública, poniéndose al frente de la movilización por unos minutos, junto a sus hijos Tomás y Milagros. Luego, rodeado de cámaras y banderas que le seguían celosamente el paso, se replegó unos metros detrás de la cabecera, donde siguió recibiendo el calor de una militancia que entonó el himno y la marcha peronista.

Se trató de la primera vez que el excandidato presidencial de UP participó de una de las movilizaciones contra el Gobierno. “Habló con su hija, que estudia en la UNSAM, y tomó la decisión de acompañar”, deslizaron en su entorno. Y agregaron: “Con el entendimiento de que los protagonistas son los estudiantes”. Pasada la media hora del arribo del exministro, la militancia del espacio que lidera se fundió con los manifestantes que ya se encontraban en la Plaza de Mayo y las banderas del Frente Renovador convivían con las de la izquierda.

En la previa a la movilización, Massa sembró sus redes sociales con indicios de su posible participación, presencia que terminó de confirmar al compartir un video de la Universidad de Buenos Aires al que acompañó con un mensaje: “Yo voy”. Así, la convocatoria de este martes, que tiene al presupuesto universitario en el centro del reclamo, representó una oportunidad para el excandidato presidencial de retornar a la escena y reconectar con la defensa de la educación pública, una consigna que durante la campaña buscó contrastar con Milei.

Sergio Massa interactúa con Malena Galmarini durante la marcha universitariaRodrigo Néspolo - LA NACION

Desde el gobierno apuntaron a torcer el tono de la convocatoria y buscaron subrayar la presencia tanto de Massa como de otros dirigentes. “Hoy vamos a cuidar a los estudiantes Sergio Massa, Axel Kicillof, Hugo Yasky, Pablo Moyano”, chicaneó la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, en la previa. De la columna del FR también participó el presidente del partido, Diego Giuliano.

Por su parte, Malena Galmarini se embarcó en una polémica a través de las redes sociales con la diputada macrista María Eugenia Vidal, quien había cuestionado la gestión de su marido al frente de Economía, al afirmar que “el presupuesto de las universidades lo congeló Massa en 2022 y prorrogó ese congelamiento en 2023″.

Más temprano, en Lanús, Kicillof cargó contra Milei. “No nos vamos a someter a la política de ajuste permanente”, dijo. Fue en un acto donde entregó 10 móviles para el Comando Patrullas municipal. Allí se refirió al recorte de fondos de Fondo de Financiamiento Fiscal (FOFOFI), que es motivo de una demanda ante la Corte Suprema de Justicia. “El gobierno nacional festejaba tener superávit, pero le faltó explicar que se basó en la caída de las jubilaciones, el desfinanciamiento de las universidades y la pérdida de derechos”, advirtió.